El pasado sábado 4 de octubre, Elche volvió a demostrar su amor por las artes escénicas con el estreno de “Romeo y Julieta, El Musical” en el Gran Teatro. Dos funciones, a las 17:00 y 20:30 horas, bastaron para confirmar que la ciudad tiene un público sensible, entusiasta y fiel al buen teatro.

Desde el primer instante, el público quedó atrapado por la belleza de la escenografía: un Verona de ensueño recreado con tejidos ricos, juegos de luces y una ambientación que parecía sacada de una pintura renacentista. El vestuario, cuidado hasta el último detalle, contribuyó a reforzar la inmersión en la historia de los amantes más célebres de Shakespeare.

Los protagonistas, junto a un elenco entregado, dieron vida a un espectáculo lleno de energía, emoción y ritmo. Las coreografías se integraron de forma natural en la narrativa, y los momentos de lucha o tensión se resolvieron con elegancia y fuerza. Detrás de cada escena se notó un gran trabajo de coordinación y un compromiso evidente por parte de todo el equipo.

La música original acompañó los momentos más intensos y melancólicos de la trama, haciendo vibrar al público. Los aplausos no se hicieron esperar, y el ambiente de entusiasmo fue creciendo hasta culminar en una ovación final que envolvió el teatro. Muchos asistentes compartieron después en redes su satisfacción, destacando el alto nivel del montaje y la emoción vivida.

“Romeo y Julieta, El Musical” ha dejado una huella en la memoria de quienes asistieron y un deseo compartido: que Elche siga apostando por producciones escénicas que nos hagan sentir y soñar. Porque noches como esta demuestran que la cultura no solo se ve, sino que se vive.

Fotos.: Juan Soler/ AFPRESS